"VENITE FILII..AUDITE ME..TIMOREM DEI DOCEBO VOS..."
"La llamada a la psiquiatría para que dejara de escuchar a los enfermos mentales no deriva de la inhumanidad; es más bien la consecuencia lógica del credo psiquiátrico que ha prevalecido por mucho tiempo: Hunter y Mc Alpine creían que la enfermedad mental no era psicogénica, de ahí que los testimonios de los locos no resultaran más que gritos de aflicción y ni siquiera servían como pistas atinadas para dar con la naturaleza de dicha aflicción: La enfermedad mental no se resuelve al descifrar lo que el loco dice, ya que,según sostenían, los trastornos mentales tienen un fundamento biológico (los pacientes son víctimas de su cerebro, no de sus mentes)
Algunas corrientes psiquiatricas poderosas promovieron, ya desde antes, estas tendencias para silenciar a los locos, especialmente en ámbitos institucionales.(..)A partir de la revolución científica la opinión prevalente postuló un modelo del ser humano en el que este era esencialmente una máquina y, por ende, las expresiones y quejas de los trastornados se reducían a meras manifestaciones secundarias,crujidos de una máquina defectuosa: algo no funcionaba bien pero esos ruidos carecían de significado. ¿Después de todo, acaso no prescribían los métodos de las ciencias experimentales observación y objetividad en lugar de interacción e interpretación?
Breve Historia de la Locura.
viernes, septiembre 05, 2008
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